Pope’s message for 97th World Day of Migrants and Refugees

Por Hna. Ruth Bolarte, I.H.M.

Esta semana, 2-8 de enero, conmemoramos la Semana Nacional de la Migración. Se observa esta Semana Nacional de la Migración desde hace más de 25 años cuando los obispos la instalaron para ofrecer a los católicos una oportunidad para celebrar la amplia spanersidad en la Iglesia y las contribuciones de los inmigrantes y refugiados. El tema principal para la semana es Renovando la esperanza, buscando la justicia. Bajo estos temas de esperanza y justicia, los obispos nos invitan a reflexionar en los retos y desafíos que impone la migración en las familias. {{more:(lea más)}}

Recientemente, hemos escuchado, orado, y reflexionado en las historias de la Sagrada Familia. La historia de Jesús está basada en la experiencia de un pueblo en exilio. María y José tuvieron que volver a la casa de sus ancestros para un censo impuesto por un mandatario. Jesús nació mientras que sus padres estaban de camino. La Sagrada Familia huye a Egipto por las amenazas de violencia de Herodes. Ellos encuentran refugio en una tierra extraña. Luego, se enteran de que no podrán regresar a su hogar tan familiar de Belén ya que el peligro de un gobernante déspota continuaba. Finalmente, son forzados a establecerse en el norte, en Nazaret. ¿Podemos imaginar los muchos retos y desafíos que la familia tuvo que enfrentar mientras que se movía de un lugar a otro?

La experiencia de Jesús de nacer dentro de una familia que fue perseguida para ser destruida es también la historia de Israel y la nuestra. La historia de Navidad pone a Jesús desde un principio junto al pobre y al vulnerable-aquellos que viven en la «incertidumbre» de cada día. Aquellos que no tiene un lugar al cual llamar «hogar». En medio de nuestras posesiones y seguridades, a veces, nos olvidamos que todos nosotros somos extranjeros o migrantes espirituales-todavía no estamos en casa.

Unos días antes de las Navidades el DREAM Act (Development, Relief, and Education of Alien Minors Act) no pudo obtener los sesenta votos en el Senado de los EE.UU. El arzobispo José Gómez, coordinador del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos en los Estados Unidos, describió este voto como un «retraso, y no una derrota». El también continúo diciendo que existe la necesidad de hacer más trabajo de educación de los católicos en los temas de inmigración y su importancia en la misión de la Iglesia y el futuro del país.

Sugiero que pongamos en nuestros calendarios la fecha de domingo, 10 de abril. En esta fecha el Cardenal Rigali celebrará la Misa para Migrantes y Refugiados a las 2:30 p.m. en la catedral de Filadelfia. También que las historias de los desafíos de nuestros hermanos y hermanas inmigrantes y refugiados nos muevan a tomar acciones concretas en los temas de inmigración en nuestro país.

La Hna. Ruth Bolarte, I.H.M., es directora del Instituto Católico para Evangelización en Filadelfia.