Por Reinaldo Pacheco
Redacción del CS&T
El sábado, 8 de noviembre del corriente tuve la oportunidad de participar en el Congreso de Vida Católica, ofrecido por la Arqui-diócesis de Filadelfia, que se llevo a cabo en la Escuela Superior Arzobispo Carroll en Radnor.
Al llegar al congreso, el perso-nal de la Oficina del Vicario para Católicos Hispanos nos dio una cordial bienvenida, nos entregó los materiales y nos dirigió al auditorio donde se llevó a cabo la misa de apertura.
Fue una celebración eucarística preciosa a cargo de nuestro Obispo Auxiliar, el Reverendísimo Robert P. Maginnis, acompañado de un grupo de sacerdotes de nuestra Arquidiócesis.
Una vez terminada la misa, nos trasladamos a la biblioteca para escuchar la presentación principal a cargo del Dr. Hosffman Ospino, profesor de teología pastoral y educación religiosa en Boston College.
El Dr. Ospino nos presentó una buena reflexión sobre lo que significa ser un discípulo misionero basado en la labor del Apóstol San Pablo. Según el Dr.Ospino, los requisitos para alcanzar una catequesis efectiva son: (1) tener un encuentro personal con Cristo; (2) aceptar el llamado del Señor; (3) ser partícipes en la construcción del Reino de Dios; y (4) estar en estrecha comunión con la Iglesia y su misión. Nos recordó que la misión principal de la Iglesia es evangelizar y por tanto, todos los bautizados somos llamados a llevar a cabo esta misión.
A diferencia de años anteriores, luego de esta presentación principal los participantes tuvimos la opción de participar en una de tres charlas que se ofrecieron en la primera sesión, a ser: mujeres de fe extraordinaria, desafíos de la catequesis bilingüe en el nuevo milenio y, San Pablo, el apóstol que escribía cartas. Yo opté por participar en la charla sobre los desafíos de la catequesis, ofrecida por Dulce M. Jiménez-Abreu, catequista, conferenciante y representante de la casa de publicaciones católicas, William H. Sadlier, Inc.
Esta charla fue muy instructiva pues nos presentaron las estadísticas de la población católica en los Estados Unidos y el gran impacto que tienen y tendrán los hispanos católicos en la Iglesia. Según Jiménez-Abreu, los retos que enfrentamos son la secularización de la sociedad, la falta de sacerdotes, la falta de catequistas; la proliferación de las sectas religiosas, y, la falta de una mejor organización y planificación de la pastoral hispana.
Sus recomendaciones fueron desarrollar un esfuerzo de pastoral de conjunto, desarrollar programas de formación para catequistas que respondan a nuestras necesidades como hispanos, y, desarrollar y formar líderes comprometidos en todos los niveles de nuestra iglesia.
Durante esta charla tuvimos la oportunidad de trabajar en grupos pequeños para discutir los retos que enfrentamos en nuestras parroquias. Esta corta discusión fue muy productiva pues nos dio la oportunidad de conocer las experiencias de otros participantes.
En las conferencias de la tarde se volvieron a ofrecer las charlas de San Pablo, el apóstol que escribía cartas y Los desafíos para la catequesis bilingüe. Además, se añadió otra charla titulada mujeres discípulos que evangelizaron al lado de San Pablo.
El congreso terminó con una oración de cierre. Fue una experiencia enriquecedora en la que tuve la oportunidad de aprender cosas nuevas, confraternizar con amigos e intercambiar ideas que puedan ayudar a continuar nuestra labor en la construcción del Reino de Dios entre nosotros.
Reinaldo Pacheco es miembro de la parroquia de Santa Inés en West Chester.
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