WASHINGTON-El padre jesuita Allan Figueroa Deck, director ejecutivo del Secretariado de spanersidad Cultural en la Iglesia, presentó el 4 de febrero los resultados de un estudio sobre el estado actual de organizaciones e iniciativas católicas al servicio del ministerio hispano. El título del estudio es «National and Regional Hispanic Catholic Ministry Organizational Initiatives: An Assessment».
El estudio, elaborado por el profesor Williams D. Dinges del Institute for Policy Research and Catholic Studies de la Catholic University of America en Washington, está basado en una encuesta y un análisis de las estructuras, servicios, actividades y retos de 20 organizaciones católicas hispanas regionales y nacionales.
«Estas organizaciones son necesarias para promover el desarrollo del liderazgo católico hispano», afirmó el padre Deck.
En octubre de 2008, un grupo de líderes católicos se reunió en el Mendoza College of Business en la Universidad de Notre Dame para aconsejar al Comité de Obispos sobre spanersidad Cultural y al Subcomité parta Asuntos Hispanos sobre el estado de estas organizaciones. Serias preocupaciones emergieron dentro del grupo asesor con respecto al estado financiero y la limitada capacidad interna de estas organizaciones, las cuales han jugado tradicionalmente un papel esencial en el desarrollo profesional, el desarrollo de la visión y la planificación para este área creciente que es el ministerio hispano.
Entre los principales hallazgos del estudio está la constatación de la escasez de fondos con que operan la mayoría de estas organizaciones así como su limitada capacidad interna en términos de planificación, personal y generación de recursos económicos. Otras aéreas de preocupación incluyen cambios frecuentes en el liderazgo y la elevada dependencia en los voluntarios, de las cuales se derivan a menudo la falta de continuidad y el «síndrome de reinventarlo todo», afirma el estudio.
La escasez de programas dedicados a la pastoral juvenil y de iniciativas para conectar con un numeroso grupo de católicos hispanos que no están formalmente afiliados con una parroquia son otras de las preocupaciones.
«Este estudio confirma lo que por algún tiempo han venido expresando muchos líderes en el ministerio hispano: el principal desafío para muchas de las organizaciones regionales y nacionales dedicadas al ministerio hispano es que su misión se ve menoscabada por una falta seria de recursos financieros y consecuentemente de personal», dijo el profesor Tim Matovina del Cushwa Center for the Study of American Catholicism de la Universidad de Notre Dame, y miembro del grupo asesor. «Fortalecer las estructuras que sostienen al ministerio hispano es una de las metas estratégicas mas importantes para asegurar la vitalidad de la fe católica de los latinos», añadió.
Michael Brough, director de planificación y programas de National Leadership Roundtable on Church Management subrayó la importancia de promover el desarrollo del liderazgo y de reforzar y aumentar la capacidad de trabajo y servicios de estas organizaciones. Asimismo, resaltó la valiosa información proporcionada por el estudio para buscar soluciones a estos problemas.
«El estudio realizado por la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos sobre las organizaciones del ministerio hispano y sus iniciativas proporciona datos importantes y necesarios para promover las mejores prácticas en todo un abanico de asuntos temporales que afectan a la Iglesia. Entre estos se incluye una gerencia efectiva, presupuestos suficientes, planificación estratégica, generación sostenible de fondos, número adecuado de empleados y gran calidad en el desarrollo del liderazgo. Sin esto, fracasaremos como comunidad a la hora de resolver las necesidades presentes y futuras de la comunidad hispana y de todos aquellos a quienes la Iglesia sirve», afirmó Brough.
«Dada la importancia de estas organizaciones intermedias para la misión de la Iglesia y para la prioridad expresada por los obispos de dar reconocimiento a la spanersidad cultural [en la Iglesia], poniendo un énfasis especial en el ministerio hispano, el grupo asesor se reunirá de nuevo para considerar maneras en las que estas organizaciones pueden ser fortalecidas», dijo el padre Deck.
Tanto el Comité de obispos para la spanersidad Cultural como el Subcomité para Asuntos Hispanos revisarán los resultados de este reporte y escucharán las recomendaciones del grupo asesor en un esfuerzo por responder de forma creativa a los retos de fortalecer los recursos y alentar las mejores prácticas.
El estudio, que fue posible gracias a fondos donados por Catholic Relief Services y The Catholic University of America, incluyó a una amplia variedad de organizaciones como la Asociacion Nacional de Sacerdotes Hispanos (ANSH), el Instituto Nacional Hispano de Liturgia, National Catholic Association of Diocesan Directors for Hispanic Ministry (NCADDHM), Nacional Catholic Council for Hispanic Ministry (NCCHM), varios institutos pastorales, la Federación de Institutos Pastorales (FIP), el Mexican American Catholic College (MACC), La Red Nacional de Pastoral Juvenil, y spanersas asociaciones y estructuras al servicio de la formación del liderazgo hispano diocesano y parroquial en sus regiones.
Los resultados en inglés del estudio «National and Regional Hispanic Catholic Ministry Organizational Initiatives: An Assessment» pueden encontrarse en http://www.usccb.org/scdc/Regional and National Hispanic Ministry Organizations Survey_1.pdf
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