Cuando un evento se vende cinco semanas antes con 300 personas en lista de espera, es seguro concluir algunas cosas. En primer lugar, el evento importa; en segundo lugar, está satisfaciendo una necesidad seria; en tercer lugar, el tema interesa mucho a la audiencia a la que está dirigido.
Esto es exactamente lo que sucedió el año pasado con la «Conferencia arquidiocesana de mujeres católicas» en el Santuario Nacional de nuestra Señora de Czestochowa en Doylestown, Pa. Tuve el placer de celebrar la misa de apertura, con más de 1.200 mujeres de todas partes de la Arquidiócesis, en tres idiomas diferentes: Inglés, español y lenguaje de señas americano. El local estaba completamente lleno.
En un momento en el que algunos afirman que la única manera de ser promujer es abogar por los anticonceptivos y el «derecho» al aborto, mujeres católicas se reunieron para un tipo diferente de movimiento –un movimiento que busca promover a las mujeres no por robarles lo que las hace mujeres, sino por honrar precisamente esas cosas que hacen a las mujeres lo que son.
La razón por la que tantas mujeres católicas viajaban temprano en la mañana para reunirse en un escondido santuario en una zona rural de Pensilvania fue escuchar el mensaje de afirmación del feminine genius; es decir, los dones particulares que Dios da a las mujeres para el alcance del mundo. Contrariamente a suposiciones seculares, estas mujeres querían escuchar lo que enseña la Iglesia acerca de las mujeres. Y pasaron el día disfrutando de los fuertes lazos de hermandad católica que inevitablemente proceden de su arraigo en la verdad.
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Adelantándonos rápido hasta ahora. Este año, el 21 de octubre, Filadelfia será la diócesis de acogida para la primera «Conferencia nacional de mujeres católicas», inspirada por el nuevo ministerio de mujeres católicas: WINE: Women In the New Evangelization (Mujeres en la nueva evangelización). WINE (por sus siglas en inglés) es un esfuerzo que reconoce el papel central de la mujer en la misión de la Iglesia de proclamar a Jesucristo a todos los rincones del mundo.
WINE entiende que las mujeres están en una posición única para desempeñar un papel de liderazgo en esta obra de evangelización. La mujer tiene una «aptitud» particular para la nueva evangelización debido a su capacidad única de relación, un don que muchos hombres harían bien en aprender más profundamente.
En la primera exhortación apostólica del papa Francisco, Evangelii Gaudium (La alegría del Evangelio), él habla acerca de la necesidad de la Iglesia de cultivar el «arte de acompañamiento» en todos nuestros esfuerzos (EG. 169-173). Él nos recuerda que el encuentro de una persona con las palabras salvadoras de Jesucristo no toma lugar en un vacío. Más bien, la conversión se produce a través de una relación de persona a persona entre el oyente y un cristiano amoroso que camina con él o ella y que con el tiempo poco a poco comparte la verdad de Dios según el oyente esté dispuesto a escucharla. Esta dimensión relacional fundamental de evangelización es lo que hace a las mujeres tan especialmente aptas para la tarea.
Espero que este año, así como el año pasado, las mujeres de toda la región llenarán el santuario en su totalidad para WINE: Women In the New Evangelization. Mientras que el evento es para todas las mujeres católicas, está diseñado especialmente para aquellas que tal vez todavía no han experimentado el gran amor de Jesucristo y la belleza de la fe católica. Así que les pido a las mujeres de la Arquidiócesis que sean valientes: que inviten por lo menos a una amiga o familiar que ha estado alejada de su fe a que vaya a la Conferencia con ustedes.
La Conferencia tendrá lugar el sábado, 21 de octubre del 2017, de 8:30 a.m. a 4:00 p.m. Usted escuchará a oradores católicos nacionalmente reconocidos y convincentes; orará; podrá compartir gran amistad y apoyo. Sobre todo, tendrá un encuentro más cercano y profundo con el amor personal de Jesucristo. ¡Espero verla allí!
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Infórmese más e inscríbase para WINE National Women’s Conference en wineconference.org.
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