Queridos hermanos y hermanas en Cristo:
¡Gloria al Rey recién nacido!
Mientras celebramos la Natividad de Nuestro Señor, escuchamos con gozo al ángel decir: «No tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de gran alegría para todos.… Hoy les ha nacido un salvador».
El milagro del nacimiento de Cristo llena nuestras mentes y corazones con un tremendo asombro por el amor de Dios que hizo la palabra carne. Nos inspira a mostrar gratitud aceptando y reflejando ese amor purísimo.
Usted, irradia ese amor cuando reconoce el rostro de Cristo en los que lo rodean y los sirve, especialmente a los más necesitados. Los simples actos de bondad y caridad que muestra a sus compañeros feligreses, vecinos, familiares y amigos se combinan con las buenas obras de los demás para construir el reino de Dios en la tierra. Durante esta temporada de gozo, que la luz que irradia del pesebre del niño Jesús encienda el espíritu de Discípulo Misionero en sus corazones.
Sepan que ustedes y sus familias son recordados en todas las Misas celebradas este año en Navidad.
¡Que Dios los bendiga con una Feliz Navidad y un feliz, saludable y santo año nuevo!
Reverendísimo Nelson J. Pérez, D. D.
Arzobispo de Filadelfia
Reverendísimo Timothy C. Senior
Obispo Auxiliar de Filadelfia
Reverendísimo John J. McIntyre
Obispo Auxiliar de Filadelfia
Reverendísimo Michael J. Fitzgerald
Obispo Auxiliar de Filadelfia
Reverendísimo Edward M. Deliman
Obispo Auxiliar de Filadelfia
Share this story