Una migrante de Honduras escribe dentro de un tráiler en Texico, Nuevo México, el 1 de febrero de 2019, mientras que el presidente Donald Trump aparece en un noticiero. El Departamento de Seguridad Nacional suspendió un plan el 12 de marzo de cancelar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para extranjeros de Honduras y Nepal. (Foto CNS-Loren Elliott, Reuters)

SAN FRANCISCO (CNS) — El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) suspendió un plan el 12 de marzo de cancelar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para extranjeros de Honduras y Nepal.

El acuerdo deriva de una demanda contra el fin del estatus especial para hondureños y nepaleses que fue interpuesta el 10 de febrero en una corte federal de apelaciones en California, por seis personas amparadas por el Estatus de Protección Temporal (TPS) y dos ciudadanos estadounidenses que son hijos de beneficiarios de TPS.

El TPS fue establecido para permitir que ciudadanos de ciertos países específicos tengan amparo legal para vivir y trabajar en EE. UU. cuando ellos no pueden regresar a su país natal por razones de seguridad ya sea debido a un desastre natural, un continuo conflicto armado u otras condiciones extraordinarias.

[hotblock]

DHS anunció el 26 de abril del 2018 que el TPS concluiría para ciudadanos nepaleses el 24 de junio próximo. Un anuncio similar el 4 de mayo del 2018 declaraba que el estatus concluiría para los ciudadanos hondureños el 5 de enero del 2020. Funcionarios de seguridad nacional argumentaron que las condiciones habían mejorado lo suficiente como para que hondureños y nepaleses regresen a sus países de origen.

En respuesta, los abogados de los seis beneficiarios de TPS y dos de sus hijos interpusieron la demanda en contra de las órdenes emitidas por DHS en relación con Honduras y Nepal, argumentando que el gobierno tomó inapropiadamente su determinación de que la situación en ambas naciones permitía el regreso de los extranjeros.

La demanda también argumenta que los beneficiarios de TPS estarían bajo peligro si ellos regresan a sus países de origen, y Nepal y Honduras no podrían fácilmente repatriar a miles de personas.

Más de 100,000 personas de Honduras y Nepal están en Estados Unidos.